Vinilos de Los Beatles como este de Blu Lab son muy comunes.
Cada vez que se habla del ‘pop art’, la imagen de Marilyn Monroe realizada por Andy Warhol emerge como por encanto.
Es que esta famosa litografía ha llegado a constituirse en un ícono que representa a este movimiento artístico nacido en la segunda mitad del siglo XX. Otra es la de The Beatles. Una más, la famosa lengua que definía a los Rolling Stone.
El pop art nació como oposición a las culturas elitistas de esa época. Se valió de imágenes como anuncios publicitarios, ‘comic books’, objetos culturales ‘corrientes’ y del cine para resaltar las decoraciones.
No obstante, este estilo dejó su huella y pervive en la decoración retro, que tienen un repunte en el mundo. El pop art es buscado por los nostálgicos y, asimismo, se adapta como un guante al estilo de vida independiente, moderno y despreocupado que caracteriza a los jóvenes y artistas.
Ambientes juveniles, sicodélicos, llenos de color e inspirados en grandes referentes de la cultura pop es la tendencia que el pop art destaca. En este estilo, cada color es una emoción y cada espacio es un lugar de expresión constante.
Sitios como restaurantes, vestíbulos, oficinas, salas y cuartos han incorporado esta propuesta a su decoración.
Las características son sillones de colores fuertes, alfombras multicolores, lámparas grandes o pequeñas llenas de diseño, cuadros o litografías de personajes famosos o vinilos que emulen tendencias o recuerdos de esa época.
El mobiliario conjuga diversos materiales, que se caracterizan por ser sintéticos, translúcidos y brillantes. Este es el caso de sillones capitoneados, sofás, muebles de líneas rectas, camas a ras del piso o cómodos pufs. En los diseños también es común encontrar fórmica o acero inoxidable. El estudio Carolina Muñoz diseña espacios que responden a esta propuesta a la medida, gusto y presupuesto del cliente .
Los colores son la parte fundamental. Se buscan tonos vivos y vibrantes como naranja, rosa, amarillo, rojo, morado, verde pistacho, azules y verdes intensos que en combinación con el negro enfatizan, matizan y resaltan cualquier rincón.
Ya que como comenta María del Carmen Lasso, de Guayaba Deco, la intención de esta tendencia es escandalizar. En su local se pueden crear mobiliarios o diversos tipos de decoración que emanan pop.
En las paredes, por ejemplo, se pueden colocar vinilos personalizados con gráficos de héroes de películas, cómics, comerciales de los años 50, 60, 70 o rostros de famosos como: Los Beatles, Marilyn Monroe, Bob Dylan, entre otros.
El pop art transmite optimismo y sentido del humor. Emilia Wright, de Blu Lab, destaca que las formas geométricas con combinaciones sicodélicas llaman más la atención.
Además, reseña que la clave para decorar una sala, un estudio o un dormitorio es usar tonos neutros como base en paredes, pisos o columnas, para ponerle color a todo lo demás.
Piezas circulares, romboides o cuadriculadas son el punto de partida ideal. La decoración se completa con cuadros, floreros, cojines, alfombras… Las combinaciones de estilos son otra constante.