En Ibarra, en este inmueble de las calles Rocafuerte y Oviedo funcionó antiguamente la Clínica Imbabura. Foto: José Luis Rosales / EL COMERCIO
Mientras que en la ciudad de Ibarra, provincia de Imbabura, hay casas patrimoniales que se deterioran por falta de mantenimiento, en San Gabriel, provincia del Carchi, a las edificaciones antiguas se les rehabilita.
Casas patrimoniales de San Gabriel. El Municipio de Montufar emprendió el proyecto de rehabilitación de las casas patrimoniales. En la foto, las casas rehabilitadas de la calle Landázuri. Foto: José Mafla / EL COMERCIO
Precisamente, esa disparidad es recogida en una exposición fotográfica denominada Ibarra 50 Años de Olvido y Montúfar Amor al Terruño. Las dos urbes, situadas en el norte de Ecuador, son parte de las 22 ciudades declaradas Patrimonio Cultural de la Nación.
La exhibición fotográfica, que es organizada por la Fundación Pedro Moncayo, estará abierta del 16 al 24 de octubre, en la sede de la entidad cultural.
Para Francisco García, quien retrató el centro histórico de la capital imbabureña, la idea es evidenciar el mal estado en que se encuentran algunas edificaciones, que forman parte de la herencia de esta urbe.
Hay inmuebles, explica, con sus techos desplomados y, otras, que tienen sus fachadas deterioradas. Incluso, en las que aparentemente están abandonadas los antiguos portones fueron reemplazados por bloques de cemento.
“Con este proyecto conocí el valor histórico de varias casonas -la mayoría levantadas tras el terremoto que destruyó Ibarra, en 1868-. En una cuadra, que mide unos 100 metros de longitud, encontré cinco casas en las que unas son preservadas por sus propietarios, en otras, en cambio, se destruyen con el sol y agua”.
Mario García, presidente de la Fundación Pedro Moncayo, rememora la historia de una casa esquinera ubicada en las calles Oviedo y Rocafuerte, en el centro de Ibarra.
En ese lugar vio nacer a sus hijos. García urga en sus recuerdos y relata que en ese sitio funcionaba la clínica Imbabura. Los médicos cirujanos, Alfonso Merlo y Luis Aguinaga, eran los propietarios del inmueble de una sola planta, que hoy luce abandonado.
Sin embargo, García lamenta que así como la antigua sede de la clínica Imbabura, otras 404 edificaciones patrimoniales se están destruyendo con tiempo.
Las gráficas enmarcadas, que miden 297 y 420 mm, adornan los pasillos de la casona de dos plantas. En el segundo piso, hay cuatro salones en los que están distribuidos un total de 60 imágenes que captaron los tesoros arquitectónicos de Ibarra y Montúfar.
Sin embargo, en una de las salas también hay una muestra de los inmuebles restaurados que pertenecen al centro histórico del cantón Montufar. Ahí, los propietarios, el Municipio local y el Gobierno financiaron proyectos para darles un uso en actividades turísticas a las viviendas privadas del centro histórico, que previamente fueron restauradas.
Walter Chichando, integrante del Centro Patrimonial de Montúfar, asegura que se invirtió USD 2 millones en la reparación de las casas. Con eso, se frenó el proceso de transformación que provocaba la sustitución de edificaciones de valor históricos por modernas, que atentaban a la imagen urbana de la ciudad.
Según Juan Acosta, alcalde de Montúfar, la regeneración de la Casa de las Sietes Puertas, la Casa Cultural Cuasmal, Casa Museo y Casona Municipal y edificaciones municipales despertaron el interés en la ciudadanía, que ven el patrimonio una oportunidad para promover el turismo.