479 años de una ciudad que se proyecta de manera constante

El despegue económico de la ciudad comenzó a orillas de este lugar (hoy Malecón 2000) hasta inicios de los 60, pues luego entró a operar el puerto. Foto: Mario Faustos / EL COMERCIO.

El despegue económico de la ciudad comenzó a orillas de este lugar (hoy Malecón 2000) hasta inicios de los 60, pues luego entró a operar el puerto. Foto: Mario Faustos / EL COMERCIO.

Nuevas áreas de ampliación del Aeropuerto José Joaquín de Olmedo. Foto: Mario Faustos/ EL COMERCIO.

El próximo jueves 31 de julio, cuando se inauguren los trabajos de ampliación, el José Joaquín de Olmedo pasará a convertirse en el aeropuerto con mayor capacidad del país.

Ese día sus instalaciones habrán crecido en una terminal de 52 000 m2 a 60 000 m2 y pasará a tener de 7 a 10 mangas de acceso a las aeronaves. Además podrá recibir a 7 millones de pasajeros, nacionales y extranjeros, al año.

Actualmente tiene capacidad para 5 millones de viajeros, categoría en la cual ha recibido distinciones como uno de los mejores del mundo. Los trabajos de ampliación tienen un costo de USD 12 millones y se financiaron con fondos de Tagsa, concesionaria del aeropuerto y sin que le cueste un egreso a las arcas del Cabildo.

Es un ejemplo del constante crecimiento y desarrollo que, históricamente, ha marcado al Puerto Principal desde su fundación.

Su alcalde Jaime Nebot lo resume en una frase: “Nada detendrá el progreso de Guayaquil, su cambio, su libertad, su futuro. La ciudad es portuaria, ese es el alma, es la tradición, es el presente, es el futuro, es el crecimiento de Guayaquil”.

Esa esencia del Guayaquil puerto se refleja en cifras: el 83,4% de las importaciones y exportaciones no petroleras se mueve por esta ciudad. Equivale a unos 16,3 millones de toneladas métricas (TM) versus la carga movilizada a través de Puerto Bolívar (El Oro) con 1,68 millones de TM, en segundo lugar con el 8,5%.

Según el ranking de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), en 2013 los puertos marítimos de Callao (Perú) y Guayaquil (Ecuador), encabezan el movimiento de carga en contenedores del Pacífico sudamericano con más de 1,5 millones de TEUs. Un TEU es igual a la capacidad de un contenedor de 20 pies cúbicos.

El despegue económico de la ciudad comenzó a orillas de este lugar (hoy Malecón 2000) hasta inicios de los 60, pues luego entró a operar el puerto. Foto: Mario Faustos / EL COMERCIO.

El exalcalde y catedrático de la Universidad Casa Grande, Francisco Huerta Montalvo, dice que Guayaquil sin puerto no existe. “El puerto es el alma económica de Guayaquil y si esa condición se pierde, la ciudad pierde también su significado. La clave es que podría ser que otras ciudades también tendrían derecho de tener su puerto y está bien. Pero un puerto necesita de una ciudad como Guayaquil para seguir manteniendo el volumen de negocios que tiene el nuestro”.

Para Huerta, es imperativo reforzar el actual puerto de Guayaquil y pensar en el nuevo puerto de aguas profundas en Posorja, “no con el sueño que por aquí van a venir los barcos post Panamá. Pero se necesita una ampliación que, a la escala de lo que está ocurriendo, impida que la carga se vaya Buenaventura o al Callao y que de allií para acá hagan cabotaje”.

Esta ciudad de 2 350 915 de habitantes (según el Censo del 2010) se proyecta también por todo lo alto. Posee los siete edificios más altos del país. El más recientemente inaugurado es la Torre The Point, el 2013. Tiene 137 m de altura y 36 pisos.

Esta edificación pertenece al proyecto inmobiliario Ciudad del Río de Pronobis, junto al manso Guayas, en una de las mayores inversiones del Ecuador en este rubro con más de USD 180 millones.

Contempla nueve edificios: Riverfront I y II, The Point, Parking Tower, Hotel Wyndham ya terminados; Bellini II, III y IV, en construcción, y, Spazio, por construirse.

Este año el Consejo de Edificios Altos y Hábitat Urbano (Ctbuh por sus siglas en inglés), galardonó a la Torre The Point como el segundo mejor edificio de altura de América solo superado por el Edith Green-Wendell Wyatt Federal Building, de Portland, EE.UU.

Ese reconocimiento marca la proyección que mantiene la ciudad en el contexto internacional. Bruno leone, vicepresidente de la Cámara Nacional de Pesquería y miembro del directorio de la Cámara de Industrias de Guayaquil, destaca que la característica de la ciudad es estar en permanente desarrollo y crecimiento.

Por ello, lidera un proyecto de establecer una Ciudad Industrial en Posorja. “Es el sitio ideal pues estaría en medio del puerto de aguas profundas y del nuevo aeropuerto que se va a construir en Daular. Tendría una ubicación estratégica”.

Leone explicó que el tema fue planteado al Cabildo porteño y el Alcalde de la ciudad ha mostrado su aprobación. El siguiente paso es traer a una de las consultoras más importantes del mundo para que realicen los estudios. “Es hacia allá donde apunta el desarrollo del nuevo Guayaquil”.

Y es justamente el nuevo aeropuerto Intercontinental de Daular el símbolo del Guayaquil del futuro. El alcalde Nebot explica que la meta es el 2024. “Debe estar listo para esa fecha que termina la concesión del actual aeropuerto. Ya se tienen los diseños y los trabajos deben iniciarse en el 2019”.

Entre 2016 y 2017 se deben iniciar trámites como los concursos abiertos, adjudicación, firma de contrato, plazo de implementación para iniciar la obra... Para entonces se tendrá alrededor de USD 300 millones generados por la actual concesión para iniciar las obras.

Para entonces el turismo habrá tomado mayor impulso. Según Huerta, Guayaquil es la primera ciudad de movilidad de ecuatorianos no solo por negocios o visitas familiares “sino por razones de turismo puro”.

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