En las afueras de la cárcel número cuatro, en el norte de Quito, se encuentran hoy, 1 de abril del 2015, los familiares del cabo primero de la Policía, Vinicio Ricardo Carvajal Castillo, de 34 años.
Él es uno de los seis policías sentenciados a 12 años de reclusión por supuesto intento de magnicidio contra el presidente Rafael Correa durante la revuelta del 30 de septiembre del 2010.
A través de Decreto Ejecutivo número 652, el Primer Mandatario lo indultó. El 18 de septiembre del 2014, Carvajal pidió a Correa que se le conceda el indulto y comenzó todo el proceso. En el Decreto se dice que “mediante escrito del 18 de marzo del 2015 (…) Carvajal ha manifestado expresamente su arrepentimiento y ha solicitado sus disculpas a todas las personas perjudicadas por los actos cometidos”. Los otros cinco uniformados procesados no aceptaron el indulto.
El 17 de diciembre pasado, el Ministerio de Justicia remitió un informe mediante el cual recomendó que se otorgue el indulto presidencial.
La esposa y la madre del uniformado ingresaron al centro de rehabilitación social para los trámites. Los allegados del uniformado se negaron a hablar. Cámaras de televisión y fotógrafos de medios impresos esperan en la puerta de la cárcel cuatro la salida del agente.