El estadounidense Oliver Utne fue requerido por la Policía de Migración para constatar su estatus migratorio en el país. Foto: EL COMERCIO
Lo que comenzó y se desarrolló como una emotiva rendición de cuentas de Fundación Pachamama terminó con patrulleros y agentes migratorios en los estacionamientos del Jardín Botánico, que fue donde se llevó a cabo el evento.
Tres ciudadanos estadounidenses, Oliver Utne, Robin Fink y Diane Hollzen, que asistían al evento fueron requeridos por la Policía de Migración, para constatar si su estatus migratorio en el país es regular.
Según Utne, cerca de las 20:00 cuando ya se iba a su casa, en el parqueadero un hombre vestido de civil lo llamó por su nombre y cuando él le preguntó qué quería le pidió que le mostrase sus papeles para ver si están en regla. Utne no traía consigo su pasaporte y ofreció ir con el hombre que le dijo que era agente migratorio a su casa a verlo. “Me dijo que pida que alguien me lo traiga, y así lo hice -asegura Utne-, pero antes de que llegue el pasaporte ya me querían meter él y otro hombre en una camioneta sin placas”. Utne y pequeño grupo de asistentes al acto opusieron resistencia.
Simultáneamente, los papeles de otras dos estadounidenses también fueron requeridos por los agentes, según otro testigo, Leo Cerda, quien acudió como particular a la rendición de cuentas de la fundación, que hace poco fue cerrada por el Gobierno. Al igual que Utne, Fink y Hollzen colaboraron en el pasado con Pacha Mama; él como consultor externo en un proyecto de transportación solar fluvial, Fink trabajó directamente en la fundación, y Hollzen como funcionaria de una ONG estadounidense que colaboraba con Pacha Mama.
Uno de los agentes encargados del operativo, José Luis Ayala, aseguró que acudió al lugar llamado por sus compañeros que se encontraban en la zona, pero que desconocía si había alguna motivación especial para este operativo. “A todas horas hacemos controles”, concluyó.
Pese a que Utne mostró su pasaporte a los policías (gente cercana se lo llevó), fue trasladado junto con las dos estadounidenses, a una oficina policial para verificar si su estatus es legal.
En medio del operativo estaban Alberto Acosta, expresidente de la Asamblea Constituyente del 2008, y Ramiro Crespo, consultor que ha colaborado en proyectos con Pachamama; Acosta acompañó a los ciudadanos estadounidenses a la gestión de verificación de sus estatus. Una caravana de vehículos de gente cercana a la fundación fue detrás de los patrulleros.