En la fotografía el general Luis Garzón, jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas y el Gral. (r) René Yandún.
La tarabita en la que perdió la vida el militar Alcides Caiza Yupanqui, de 30 años de edad estaba en malas condiciones, según las autoridades. El hecho se registró el pasado lunes 17 de noviembre en la comunidad de Chilma Bajo, a 64 km de Tulcán, en el norte del Ecuador.
El suboficial falleció tras caer desde aproximadamente 120 metros y chocar contra uno de los cimientos de esa estructura. El gobernador del Carchi, Diego Landázuri informó que el pasado domingo estuvo en la comunidad de Santa María.
Allá constató el estado precario de esa infraestructura que cuenta con un saco de yute suspendido por un cable para movilizar a los pobladores. “Ese día (domingo) se acordó invertir USD 15 000 para dotar de cables seguros y adaptar una canastilla metálica con arnés. Sin embargo, coincidencia o no, un día después se accidentó el uniformado”.
Para Luis Garzón, jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas se trató de un accidente que le pudo haber sucedido a cualquier poblador del sector y en ese momento cuando colapsó el cable coincidentemente estuvo el cabo Caiza.
“No se puede investigar más allá de lo que posiblemente se ha dicho hasta ahora. Se rompió el cable de forma accidental y no se trató de una imprudencia o un hecho provocado”.
Garzón explicó que Caiza participaba en el levantamiento de un censo en esa zona y en el análisis para la elaboración de un mapa de las rutas de evacuación ante una posible erupción de los volcanes Chiles y Cerro Negro. “Él estaba cumpliendo con su trabajo”.
René Yandún, militar retirado considera que cuando los uniformados están en patrullajes corren riesgos que son propios de la misión que cumplen. Considera que fue un accidente y cuenta que dentro de los estudios que hay en las Fuerzas Armadas anualmente se registra un tres por ciento de accidentes, cifra que es considerada como razonable.
Garzón comentó que las Fuerzas Armadas se solidarizan con los familiares del uniformado accidentado, que deja una esposa y dos hijos en la orfandad. Mientras que el gobernador Landázuri anunció que en las próximas horas destinarán los recursos para rehabilitar la tarabita y reconstruir el camino que por efectos de las lluvias está deteriorado. Las dos obras fueron declaradas en emergencia.