El papa Francisco, conocido por su afición al fútbol, bromeó con un grupo de guardias suizos sobre el partido que disputará hoy, martes 1 de julio de 2014, la selección argentina ante los helvéticos en los octavos de final del Mundial de Brasil.
“Va a ser la guerra”, dijo jocosamente el pontífice a un integrante de la Guardia Suiza apostado frente a la residencia de Santa Marta, donde se aloja el argentino Francisco en el Vaticano.
Según informó la agencia de noticias religiosas francesa I.media, el Papa no aceptó la invitación de los guardias suizos para que viera el partido con ellos en el cuartel, a pocos metros de Santa Marta. “Lamentablemente no puedo”, respondió Francisco, de acuerdo con la fuente.
El Vaticano no se pronunció directamente sobre el informe, pero el Consejo Pontificio para las Comunicaciones Sociales publicó una caricatura en su cuenta de Twitter (@PCCS_VA).
La viñeta muestra a dos guardias suizos riendo y bebiendo cerveza mientras miran el partido por televisión, con el papa en el fondo, con una bufanda de Argentina y mirando disgustado. Desde hace más de 500 años, la Guardia Suiza es el cuerpo militar encargado de la seguridad del papa y del Estado del Vaticano.
Antes del inicio de Brasil 2014, el papa Francisco había anunciado que se iba a mantener neutral durante el Mundial de fútbol. “Los brasileños me pidieron neutralidad”, dijo al diario español “La Vanguardia”. “Y cumplo con mi palabra porque siempre Brasil y Argentina son antagónicos”, añadió.
El papa, de 77 años, es hincha del club de Buenos Aires San Lorenzo de Almagro.