Redacciones Sierra Centro, Guayaquil y Ambato
Byron Muñay, estudiante de la Facultad de Electrónica de la Escuela Politécnica de Chimborazo, ya no va a los cibercafé para conectarse a la Internet.
El joven, desde diciembre del año pasado, se conecta ocho horas a la semana, a través de una red de acceso inalámbrica instalada en el parque Maldonado. Es en pleno centro de Riobamba.
Es el único sitio público de la capital de Chimborazo, en donde las personas pueden acceder gratis a la red, con computadoras portátiles. El proyecto para habilitar zonas Wi Fi es financiado por el Municipio de Riobamba.
“Estoy ahorrando un promedio de USD 5 semanales. Utilizo mucho Internet, porque estoy elaborando mi tesis”, dice Muñay.
El estudiante reconoce que el sector es seguro, por la permanencia de la Policía Municipal.
A pocos metros de Muñay está Mónica Hidrovo. La chica es otra de las usuarias que constantemente utiliza ese beneficio.
Va al parque, para conectarse a la red, cuatro veces a la semana. Se conecta dos horas diarias, para bajar información, para su tesis de Periodismo.
“Ahorro USD 2,1 cada día. Ese dinero lo invierto en otras cosas. Este es un proyecto importante, que ayuda a los estudiantes”.
Rosa Zabala, jefa de Sistemas del Municipio de Riobamba, explica que aún no hay un registro de cuántas personas utilizan el servicio cada día. “Al mismo tiempo se pueden conectar hasta 32 ordenadores”.
La instalación de la red Wi Fi demandó la inversión de USD 2 500. El parque Maldonado fue escogido porque es uno de los íconos de la ciudad y el más visitado por turistas.
En el país, en Quito, Guayaquil, Cuenca, Manta, Portoviejo, Puerto López, Riobamba, Ibarra y Machala hay sitio públicos que tienen red para conectarse sin costo a la Internet. Por lo regular, las zonas escogidas son los parques, las plazas, los centros comerciales y los aeropuertos.
En Guayaquil, la oferta del servicio gratuito va acompañado de computadoras portátiles, en los patios de comidas.
El Internet inalámbrico es gratuito en todos los centros comerciales del Puerto Principal, menos en San Marino. Allí hay que comprar una tarjeta de conexión inalámbrica, para el acceso.
Para Eduardo Béjar, miembro del equipo de la Fundación de ayuda por Internet (Fundapi), las empresas justifican su inversión en redes inalámbricas, con la publicidad que les genera presentar su marca en sitios públicos.
Las universidades de la ciudad han implementado el servicio de wireless abierto. Los estudiantes y el personal administrativo reciben un código de usuario y una contraseña. El propósito es evitar que personas ajenas a la institución accedan al servidor.
En la capital azuaya hay 14 zonas para acceder gratuitamente a la Internet. De estos sitios, 10 son parte de un proyecto de Etapatelecom, de propiedad del Municipio cuencano. La iniciativa se inició en abril de 2008, con una inversión de USD 200 000.
Según Boris Piedra, gerente de la telefónica, en las horas pico (15:00) se registran 40 conexiones desde estos sitios.
Para conectarse en los puntos de acceso público se debe digitar el usuario wifi@etapatelecom y la contraseña: gratis.
El proyecto busca mejorar el acceso a la Red y que los turistas tengan un espacio para conectarse en plazas, parques y sitios turísticos como El Barranco.
El acceso gratuito
Los sitios públicos con red para acceder gratis a la Internet también son escasos en la región Amazónica. Entre octubre de 2008 y marzo pasado, el malecón construido a orillas del río Zamora tuvo este servicio.
Ese sitio no solo se convirtió en el área de descanso para los zamoranos. También era un lugar de estudio. Un promedio de 25 personas utilizaba cada día la red gratuita. El servicio se suspendió, porque se terminó el convenio entre la Prefectura y la empresa proveedora.
En Ibarra, la Esquina de El Coco cuenta con este servicio. En esta ciudad proliferan los bares y restaurantes en donde hay zonas con Wi Fi, especialmente están ubicados en el sector del centro histórico. Las misma tendencia es notoria en otras ciudades de Imbabura como Otavalo y Cotacachi.
En Loja, una ciudad muy reconocida por las universidades y por la actividad académica, no hay sitios públicos con Internet gratuito. En los centros de educación superior, los estudiantes sí acceden a ese servicio.
En las ciudades donde hay Wi Fi, los planes son impulsados por los municipios o por las prefecturas. En Cuenca se aplica el proyecto más consistente, que busca dotar al Centro Histórico de este servicio. El fin es ofrecer otro valor agregado a los turistas locales y extranjeros.