Los estudiantes que participaron en las protestas, a las afueras de sus colegios, el 17 de septiembre serán cambiados de planteles educativos. Foto: Eduardo Terán/ EL COMERCIO
Entre 20 y 30 estudiantes, en especial del Colegio Montúfar, pero también del Mejía, serán separados de estas instituciones. Esto por haber participado de las manifestaciones de ayer miércoles 17 de septiembre, convocadas por gremios y organizaciones opuestas al régimen. Y también por el oficialismo.
El ministro de Educación, Augusto Espinosa, confirmó a este Diario, que le decisión está tomada. Indicó que no era necesario conocer los antecedentes de los colegiales, es decir saber si antes han participado de otras protestas. Reiteró que él les advirtió que no debían ser parte de daños a la propiedad privada. Pero lo hicieron, algunos dijo, seducidos por la idea de lanzar piedras y sin tener vinculación a ningún movimiento o partido político.
Espinosa aclaró que todos los chicos serán reubicados en otros establecimientos pues el Ministerio garantizará su derecho a la educación. Se desconoce las edades exactas, pero se sabe que son menores de edad.
Una madre de familia de uno de los involucrados dijo no estar enterada de la situación de su hijo. Señaló que el chico fue normalmente a clases hoy. Y que esperaba su regreso en la noche para conocer si las autoridades del plantel les habían indicado algo. Pidió que se analice caso por caso pues según aseguró su hijo solo llegó tarde al colegio ayer y fue vinculado con manifestantes.
En el 2013, un grupo de estudiantes del Central Técnico también fueron sancionados con la separación del colegio. Los menores de edad hicieron trabajo comunitario y tuvieron que pagar por los daños a la propiedad privada que causaron en una manifestación. Otro grupo, de mayores de edad, fue acusado por el delito de rebelión del que más tarde fue sobreseído.