Los jugadores de la Sub 12 de Deportivo Quito se entrenan a diario en el parque de La Carolina, norte de la ciudad. Llegan acompañados por sus padres. Foto: Jenny Navarro/ EL COMERCIO
La hierba alcanza los 40 centímetros de altura en los extremos de una cancha improvisada, en el complejo de La Armenia.
Detrás de esa vegetación hay árboles por donde se escabullen los balones tras probar la puntería de 28 adolescentes. Esos jugadores pertenecen a la Sub 14 de U. Católica y ese es su lugar de entrenamiento.
Sobre ese gramado es difícil receptar y entregar el balón. La cancha no es la adecuada, coinciden Vinicio Barahona y Patricio Lara, DT y coordinador de las formativas, en ese orden.
Para jugar fútbol se trasladan a la cancha contigua, cuando está libre. La Sub 12 se entrena en Puembo y todas las categorías se nutren con jugadores de provincias que llegan en los llamados semestrales o con la ayuda de ‘cazatalentos’.
Son las 16:30 del miércoles pasado (23 de julio de 2014) y el sol sigue inclemente: quema, agota, y los jóvenes carecen de un dispensador de agua cercano. El punto de hidratación está a 250 metros.
El entrenamiento recién ha empezado y el médico que socorre a los jugadores de la Sub 16 está por retirarse. Su labor terminó y ahora Barahona cruza los dedos para que ninguno de sus pupilos se lesione.
En esas condiciones se entrenan los jugadores de formativas de Católica y Lara cree que eso se da por la falta de atención de los directivos. Aclara que es un “mal” a escala nacional.
La ‘Chatoleí’ es uno de los clubes que está al día en el pago de los salarios, pero Lara cree que hay cosas por mejorar.
Pablo Cortez, encargado de las formativas de El Nacional, coincide con su colega, aunque afirma que con la llegada del presidente Jorge Yunda la situación mejoró.
Yunda piensa que el futuro del fútbol local está en las canteras y por ello destino el 40% del presupuesto anual (USD
2 700 000) para suplir las necesidades de las formativas. En el 2012 y 2013, la directiva destinó el 10% de USD 4 millones.
En El Nacional trabajan con las categorías de competencia Sub 12, 14, 16, 18 y Reserva, y también con la 11, 13, 15 y 17.
Las Sub 12 se nutre de los talentos que llegan a las escuelas que tiene el club criollo a escala nacional. Esos jugadores llegan ya con bases de la disciplina.
Los chicos que están en las categorías pares reciben indumentaria para entrenarse y competir. La ayuda económica se eliminó. Hay casos puntuales como el de Alan Minda, Sub 12, quien tiene contrato y recibe un sueldo básico mensual.
Aunque faltan más bidones de agua y un refrigerio, ahora los 35 jugadores que viven en Tumbaco reciben sus tres comidas completas al día.
En el 2013, dice Cortez, tenían solo plato fuerte, que en varias ocasiones fue arroz con huevo.
Ahora cada categoría tiene 10 balones oficiales. Antes, ensayaban con los marca Mikasa, que según Dennis Sosa, preparador físico de la Sub 16, era como patear una piedra.
Los viajes fuera de la ciudad también mejoraron. Ahora se movilizan en Flota Imbabura. Trasladarse a Loja, por ejemplo, les tomaba 14 horas. Ahora llegan en 10. En avión solo viajan los jugadores de Primera.
En bus también se movilizan los jugadores de las formativas de Liga de Loja. Jaime Villavicencio, presidente, argumenta que mantener las formativas es complicado porque requiere inversión e infraestructura, algo que no tienen. Los deportistas se entrenan en las canchas de la Universidad Nacional.
Este equipo tiene categorías menores desde el 2010. De allí salió Johnny Uchuari, que con 14 años debutó en la Serie B.
El Quito sufre del mismo mal. La Sub 12, por ejemplo, se entrena a diario en el parque de La Carolina. Los pequeños patean el balón esquivando a los árboles que están colocados a 15 pasos unos de otros.
Los chicos no hacen fútbol, el espacio no lo permite. El estratega Leonardo Álvarez, con 15 meses impago, plantea su equipo el día del partido.
Con ese panorama, Álvarez dice sentir una envidia sana por el trabajo que realizan Liga de Quito e Independiente.
Para él, el club sangolquileño es un ejemplo. En su complejo hay canchas para cada categoría y pronto estrenarán la sintética. En dos meses, en cambio, estará listo el gimnasio para las formativas. La piscina ya fue estrenada y sirve para recreación y rehabilitación.