El mercado de los ‘cracks’ se mueve

Jonathan Gonzalez (51) del Independiente del Valle pelea el balón con un zaguero de El Nacional. Foto: María Isabel Valarezo/ EL COMERCIO

Jonathan Gonzalez (51) del Independiente del Valle pelea el balón con un zaguero de El Nacional. Foto: María Isabel Valarezo/ EL COMERCIO

Jonathan Gonzalez (51) del Independiente del Valle pelea el balón con un zaguero de El Nacional. Foto: María Isabel Valarezo/ EL COMERCIO

El delantero Daniel Angulo y el volante Jonathan González se reunieron con su representante, José Luis Chiriboga, para conversar sobre las posibilidades de ser transferidos al fútbol extranjero. Esto ocurrió antes de la decimocuarta fecha de la segunda etapa, cuando Independiente del Valle perdió sorpresivamente 3-0 ante Deportivo Quito.

Tras esa cita y en aquella derrota, Angulo terminó expulsado y González tuvo un día de desaciertos. El DT Pablo Repetto atribuyó ese bajo desempeño a la distracción que generan las conversaciones con los empresarios por el anhelo de migrar al exterior.

Por eso prohibió el contacto de sus pupilos con sus representantes, porque ya no quiere desconcentraciones.
 El trabajo de los empresarios es arduo en estos meses, cuando el torneo está por finalizar, para reubicar a los jugadores en otros equipos locales, en el extranjero o para extender los contratos con nuevas condiciones.

Como muestra, al inicio de esta temporada se registraron 80 transferencias solo en la Serie A.
Para el torneo 2015, ya se confirmaron las dos primeras contrataciones por parte de El Nacional, que fichó a Christian Márquez y Christian Cordero. El primero defendió al Manta y el segundo al Mushuc Runa. De igual forma, es probable que de filas criollas salgan jugadores. Patricio Cevallos, coordinador del club, afirmó que en estos días la presencia de empresarios en Tumbaco ha sido mayor.

La Federación tiene registrados a 13 agentes, cuyos nombres aparecen en la página de la FIFA. Estos empresarios reciben licencias de cada asociación para que puedan actuar internacionalmente con el aval del organismo mundial. Sin embargo, localmente también hay empresarios que operan informalmente, cuyo número no está cuantificado.
“Ni el club ni yo estamos en contra de que los jugadores puedan cambiarse de equipo o ir al extranjero.

Solo pedimos que no se distraigan, que se dediquen a eso al final del Campeonato”, pidió Repetto.
No hay un número exacto de la cantidad de futbolistas que cuentan con representantes. Sin embargo, para tener una idea, Diego Herrera y Jorge Guerrero, dos de los empresarios con licencia, cada uno tiene bajo su representación 45 futbolistas, incluidos juveniles. Ellos suelen asistir ciertas necesidades de los deportistas, como parte de sus estrategias. Además, su comunicación con los directivos es permanente.
“Siempre hablo con los jugadores, pero no les menciono nada sobre las posibilidades, para evitar distracciones.

El haber sido futbolista me permite entenderles”, argumentó Herrera, quien fue delantero. Él llevó al exterior a Antonio Valencia, Jefferson Montero, Félix Borja, Fernando Guerrero, entre los más destacados.
Hoy, futbolistas como González, Júnior Sornoza, Miler Bolaños y Cristian Penilla, los más nombrados, son considerados por los empresarios candidatos a exportar, que pudieran sumarse a los 54 legionarios, juveniles y experimentados, regados por el mundo.
En los 24 clubes de Primera hay un aproximado de 720 futbolistas, quienes siempre están dispuestos a cambiar de camiseta por el beneficio personal y de sus familias.

Un ejemplo es el paraguayo Lauro Cazal, quien está de ‘moda’ por la dupla que formó con Jimmy Delgado en Aucas, en la Serie B. En el cuadro oriental los foráneos ganaron hasta USD 4 000, pero él y su representante, el uruguayo Johan Wilson, saben que en la Serie A los extranjeros reciben salarios mínimos de USD 8 000. Ellos ya tienen propuestas de otros equipos de Pichincha. 


“Hay que ser realista, que la vida activa de un futbolista es corta, dura en promedio 10 años. Tenemos que aprovechar las oportunidades que se nos presentan y eso deben entender los directivos y los hinchas”, justificó el delantero de 28 años, quien tiene propuestas de otros clubes quiteños.

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