Los especialistas recomiendan tomar las clases en la mañana y en la noche. Foto: Archivo
El yoga, esa milenaria práctica en la que se trabaja de manera integral el cuerpo, la mente y el espíritu, es una de las alternativas del verano.
En Quito hay academias y centros donde se practican algunas de las variantes de esta tradición que nació en la India y que ya está difundida por el mundo.
Una de las variedades es el Kundalini Yoga que combina posturas físicas, respiración, cánticos y meditación.
En Sat Kartar, un centro al que acuden niños, adolescentes y adultos de toda edad, atienden desde las 06:30, de lunes a viernes.
Allí reconocen que durante el verano hay más afluencia de niños y chicos que aprovechan sus vacaciones para buscar la unión entre la conciencia individual y la infinita. Ese es otro de los objetivos de esta práctica, explica Mariela Calderón, una de las instructoras del centro ubicado en la Villalengua y Sancho de Carrera, al norte de la ciudad.
En este lugar los niños aprenden las posturas con juegos. Incluso registran casos de chicos de tres años que ya incursionan en estas enseñanzas.
Para los adultos hay clases que persiguen distintas finalidades. Esto ocurre porque hay posturas y ejercicios para eliminar dolores de espalda, cuello, piernas… otros que mejoran la circulación, el estrés, entre otras dolencias.
En este centro de Kundalini Yoga las clases duran una hora y 15 minutos. En ese tiempo primero cantan un mantra, que son sílabas, fonemas y palabras que devienen del Sánscrito y que “permiten mandar un mensaje al cerebro y al cuerpo”, según explica la instructora.
Luego, realizan calentamientos corporales que permiten pasar a las posturas de Yoga. Más adelante se pasa a una etapa de relajación, por lo que después de cada práctica la persona se siente renovada. Todo eso ocurre en 75 minutos.
Para las personas interesadas en incursionar en estos conocimientos, en este lugar se puede tomar una clase de práctica por solo USD 2.
En un inicio, los expertos recomiendan acudir a tres clases por semana. La práctica adecuada del yoga fortalece los músculos y los huesos. Aumenta la flexibilidad y el equilibrio. También, como se prioriza una respiración profunda, oxigena y limpia el organismo.
Al obtener esos beneficios físicos se disminuye el estrés y se mejora el ánimo.
Se recomienda realizar las posturas con ropa cómoda, por lo que una camiseta y un pantalón de calentador son suficientes. Es preferible quitarse los accesorios, como anillos, cadenas, pulseras. Para evitar contratiempos es preferible comer al menos una hora antes de la actividad física.