La renovación de modelos como el Corolla y El RAV4 fue clave en la estrategia comercial de la marca. Foto: AFP
Tras la publicación de sus cifras de ventas del 2014, Toyota se mantuvo como el primer constructor mundial de automóviles, aunque con el grupo alemán Volkswagen siguiéndole los pasos de cerca.
Los dos fabricantes superaron, por primera vez en la historia, los 10 millones de vehículos vendidos en un año. El japonés superó su objetivo anual al vender 10,23 millones de unidades de todas sus marcas (Toyota, Lexus, Daihatsu e Hino), frente a los 10,14 millones del alemán.
Para el 2015, Toyota espera vender un total de 10,15 millones (-1%), cifra que el conglomerado Volkswagen podría superar.
Aunque VW no llegó a cumplir sus proyecciones, abriga grandes ambiciones para este año, sobre todo en China, donde prevé abrir dos nuevas plantas de producción que podrían cambiar el panorama.
El gigante japonés, ubicado en la región de Nagoya y con 330 000 trabajadores en medio centenar de fábricas en el mundo, conquistó la primera plaza mundial en el 2008, a inicios de la crisis financiera internacional, tras arrebatarle esa posición al estadounidense General Motors (GM) que la ostentó durante más de 70 años.
Desde entonces, Toyota se ha mantenido como líder del sector, excepto en el 2011, debido a los efectos del terremoto y tsunami que sacudieron el noreste de Japón el 11 de marzo de ese año.
Entonces GM se impuso de nuevo. Ahora aparece en el tercer lugar con 9,92 millones de vehículos vendidos en el 2014.
Lejos de celebrar el logro, Toyota prefiere evitar toda comparación con los resultados de otras compañías. “Vamos a seguir concentrándonos en la producción de autos, uno por uno”, se limitó a comentar un portavoz de la firma.
A diferencia del alemán, el grupo dirigido por Akio Toyoda, nieto del fundador, no construirá nuevas plantas hasta marzo del 2016 para “reforzar la competitividad”.
“Si la demanda supera nuestra capacidad de producción utilizada al máximo, entonces pensaremos en la ampliación tras un examen exhaustivo de las tendencias del mercado”, agregó el vocero.
Para este año las expectativas son desfavorables en Japón, donde se espera una contracción del 9%. En el resto de Asia la situación no es muy diferente, tanto en los países emergentes (Indonesia y Tailandia) como en China, donde el crecimiento económico se apaga.
En cambio, Toyota está bien situada en Estados Unidos, a pesar de la serie de recientes llamados a revisión de sus vehículos debido a los problemas derivados de los airbags defectuosos que fabrica la empresa japonesa Takata.
A diferencia de rivales como Nissan, que deslocalizó parte de su producción cuando el yen estaba fuerte, Toyota, que ensambla más del 40% de sus automóviles en suelo nipón, se está beneficiando de la devaluación de la moneda.
Para finales de marzo del año en curso espera un aumento del beneficio neto del 10% anual.
Atención a la calidad
Reconocimiento.Tal como ha sucedido en los últimos cinco años, Toyota también volvió a consagrarse como la compañía automovilística y la marca con la mejor percepción de calidad por parte de los clientes. Ambos títulos son el resultado de los estudios realizados por consultoras mundiales del sector empresarial tales como BrandZ e Interbrand entre los consumidores.