Después de una prohibición de más de una década, el Xbox One de Microsoft ingreso al mercado chino. La firma tiene proyectado ventas potenciales de al menos USD 10 000 millones.
Sony y Nintendo también estaría por entrar a ese país aprovechando la coyuntura.
A pesar de lo positivo que puede parecer la medida para algunas empresas, éstas pudieran enfrentar una ardua batalla para abrirse campo en el mercado de un país en el que prácticamente una generación creció sin Play Station, Wii o Xbox. Y, y por si fuera poco, tenían a su disposición juegos gratis para las computadoras y móviles, como se reseña en el diario El Universal, de Venezuela.
Microsoft empezó esta semana a recibir pedidos de su nueva consola de juegos por parte del minorista en línea JD.com Inc.
La primera Xbox ni siquiera existía en el 2000, cuando el Partido Comunista prohibió los videojuegos por creer que supuestamente afectaban a los niños.
Pero ahora, las consolas de juegos se incluyeron en la lista de ítems que debían ser liberalizados antes de la creación de la zona de libre comercio de Shanghái que se llevo a cabo en septiembre del año pasado y que se están aplicando de forma progresiva.