Las cirugías estéticas ya no son una exclusividad femenina

En los últimos años aumentó la preferencia masculina por estas operaciones y otros tratamientos de belleza.

La reciente aparición de la actriz Renée Zellweger, con el rostro muy distinto al que todos conocíamos, volvió a poner en el tapete el tema de las cirugías plásticas con fines estéticos.

Los medios de comunicación usaron imágenes antiguas para compararlas con las actuales y dejar entrever que a la actriz quizá se le había pasado la mano con las operaciones. Sin embargo, ella declaró a la revista 'People' que se encontraba bien de salud, que como todos había envejecido y que ahora se estaba dedicando más a su cuidado personal.

No es novedad

La cirugía plástica data de hace dos mil años. En la India y en la Roma clásica se practicaban rinoplastías y reconstrucciones de orejas y labios, a partir de tejidos de otras partes del cuerpo.

Sin embargo, desde la segunda mitad del siglo pasado en adelante estas intervenciones se usan para corregir imperfecciones corporales desde el punto de vista netamente estético.

La búsqueda de esta 'perfección' ha llevado al desarrollo del trastorno dismórfico corporal, que es la obsesión por corregir imperfecciones que pueden ser imaginarias.

Y mientras los rangos de edad para operarse han disminuido y hay adolescentes que tratan de hacerlo desde los 15 años, las mujeres de más edad optan por tratamientos no quirúrgicos.

Lo interesante es que cada vez son más los hombres que se preocupan por su aspecto y recurren a este tipo de soluciones estéticas.

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