Mariana Andrade, secretaria de Cultura del Municipio de Quito. Foto: Diego Pallero/El Comercio
Mariana Andrade es secretaria de Cultura de Quito desde hace siete meses. Ha sido productora cinematográfica y directora de la sala Ochoymedio. También ha organizado festivales de artes escénicas. En una entrevista con este Diario habló sobre su gestión.
En siete meses de trabajo, ¿cuáles son los proyectos destacados de su gestión?
En estos meses hemos creado los Fondos SECU para la Creación Artística, el Verano de las Artes, el Portafolio de Festivales, organizamos el Encuentro de parroquias, reorganizamos el tema de Cumandá. Hemos trabajado también para que el programa Cultura Viva sea parte de la nómina municipal y que no esté anexo a las fundaciones.
La Red de Salas y Espacios Independientes fue una propuesta previa a su llegada al cargo. ¿Cómo se ha trabajado al respecto?
Este es un ejemplo muy claro de cómo las iniciativas ciudadanas logran agruparse a través de su identificación para que así se puedan crear políticas públicas. La Red, al haberla constituido como de interés público, quiere reconocer a esos espacios que han gestado cultura por décadas. Estas salas ocupan 5 000 metros cuadrados de la ciudad. Son lugares donde no es importante la masa de un espectáculo grande, sino que se realicen procesos sostenidos. En total la conforman 45 salas en todo el territorio metropolitano.
Entre estos espacios se encuentra el Teatro Bolívar. ¿Qué sucederá con este escenario dentro de los próximos meses?
Primero levantamos una clausura que duró muchos años. Ahora queremos que ese escenario entre en funcionamiento con todo el rigor del caso. Sin embargo, el teatro debe arreglar varios asuntos pendientes. Requiere apoyo financiero y, en ese sentido, entraremos en mesas de diálogo.
Talleres Abiertos de Quito permitió conocer de cerca los proyectos locales de barrios de la ciudad. ¿Pero cuáles fueron sus resultados?
Los Talleres Abiertos de Quito han permitido ubicar a estas economías solidarias que son parte de los barrios. Fue una iniciativa para conocer al líder barrial, al artesano, a los emprendimientos. Los talleres muestran rutas por donde suceden los proyectos culturales de la ciudad. Y eso ayuda a plantear una Secretaría que no solo trabaje con el sector cultural sino en conjunto con las 74 comunas, las 66 parroquias, las nueve administraciones zonales, con las asociaciones de artistas, de músicos, etc.
¿Se están creando políticas culturales en la ciudad? ¿O se está trabajando estrictamente en la producción de eventos?
Es muy poco tiempo para hablar de políticas culturales. Yo sueño dejar en esta administración todo sembrado. No cambiarlo porque es poco. Quiero alistar una ordenanza de cultura que recoja derechos, incentivos. Es necesario dar forma al gobierno cultural local.
¿Se han entablado diálogos con otras instancias gubernamentales para crear estas políticas?
Con el CNCine mantenemos una relación por mi trabajo anterior. Con el Ministro de Cultura y Patrimonio quisiera dialogar también. Creo que las políticas culturales se construyen solo con el apoyo de todos quienes forman parte del sector. Ahora es momento de convertir a Quito en un referente regional, algo posible en un trabajo en conjunto entre entidades municipales, estatales y la ciudadanía.
¿Qué sucedió con el contrato con Shungogrande sobre el cual diario El Telégrafo informó ciertas irregularidades?
Es que hay un error muy grave en la información dada.
Shungogrande no es una compañía limitada. Es una asociación o cuentas en participación que está legalmente constituida. La misma no está dentro de la lista de compañías porque no tiene esa obligación legal. Sin embargo, la Ley de Contratación Pública los faculta y autoriza y ellos están totalmente avalados para que sean contratados en este tipo de experiencias. No es una compañía limitada. Lo más grave de esta nota es que no se dice que el contrato se cumplió a cabalidad.
¿Shungogrande se constituyó exclusivamente para dar servicios al VAQ?
Ellos se constituyen porque son productores. Nosotros consideramos que tienen la experiencia. Nosotros queríamos algo muy puntual y lo cumplieron al 100 %.