¿Son normales los matrimonios y las relaciones que no tienen sexo?

Existen parejas que pueden vivir sin tener una vida sexual activa. Foto: FAMILIA / Archivo.

Existen parejas que pueden vivir sin tener una vida sexual activa. Foto: FAMILIA / Archivo.

Existen parejas que pueden vivir sin tener una vida sexual activa. Foto: FAMILIA / Archivo.

Alrededor de 40 millones de norteamericanos confiesan no tener relaciones sexuales y algunos de ellos se sienten perfectamente felices con ello. A continuación los detalles que pueden determinar si un matrimonio sin sexo es sano o si tiene necesidad de entrar en calor.

A través de la tele, la radio o el twitter, el mensaje siempre es claro: si se está en una relación, con seguridad esta es cálida, increíblemente sensacional, con una sexualidad total permanente.

Sin embargo, las investigaciones demuestran que en un 10-20 % de las relaciones románticas en los Estados Unidos no practican el sexo, según el doctor Robert Epstein, famoso psicólogo de san Diego y fundador y director del Centro Cambridge de Estudios del Comportamiento en Beverly, Massachussets. Esta cifra significa 40 millones de personas en los Estados Unidos.

Y esto pudiera ser una cifra estimada baja porque muchas personas se rehúsan a confesar algo sobre sus relaciones sexuales. Debido a la obsesión de la sociedad frente al sexo, algunas parejas sienten vergüenza de admitir que no están experimentando un cierto nivel de frecuencia sexual o de satisfacción.

Lo que “no sexo” realmente significa

Técnicamente, una relación sin sexo se define como una pareja que tiene menos de un encuentro sexual al mes, según el doctor Epstein. ¿Qué significa esto en su relación? Con seguridad no quiere decir que hay falta de amor, ha dicho Jennifer Reed, una terapeuta de parejas casadas de Santa Bárbara, California. Ella estima que un 5 a 7 % de las parejas que van a su consulta son totalmente felices en sus matrimonios sin sexo.

¿Están ambos contentos de no practicar el sexo?

Las parejas pierden el ‘factor sexo’ de varias maneras. Ambos pudieran tener un deseo sexual bajo y escoger no tener un encuentro a menudo. A veces, sin embargo, la vida se interpone: la satisfacción sexual pudiera interrumpirse debido al embarazo o al nacimiento del bebé, a problemas de salud o de la edad en general. “Cuando el sexo es bueno significa un 5 % del matrimonio, pero si es malo, la cifra es de 95 por ciento. La clave es comprender lo que es bueno y lo que es malo. Bueno significa que cada uno siente que su necesidad sexual está cubierta. Malo significa que al menos una de las necesidades de la persona no está siendo cubierta”, señala Freed. Añade que si ambos miembro de la pareja tienen un deseo sexual bajo y sus necesidades están siendo cubiertas, ellos tendrán un matrimonio perfectamente feliz y sin sexo.

Cuando hay una razón física para la falta de sexo, como un problema de salud, ambos miembros de la pareja acuerdan en un horario de actividad sexual adecuado y, son felices con ello.

Después de todo, las parejas se abrazan, se acarician, se toman de la mano, se dan masajes y mantienen su intimidad de varias maneras. Los problemas ocurren cuando hay un desbalance, por ejemplo, si uno de los dos tiene un deseo sexual bajo y el otro uno alto, incluso si ambos comenzaron su relación sexual con un deseo similar y en un momento dado uno de ellos cambió sus necesidades de satisfacción sexual o si él o ella desarrolló alguna enfermedad como la incontinencia urinaria que le hace sentir timidez y se aleja de sexo.

Por supuesto que hay muchas personas en una relación sin sexo que no se sienten felices. ¿Qué hacer? Para Freed, la intimidad sexual es buena para la unión emocional y fabulosa para la salud y el bienestar: quema las calorías, fortalece el sistema inmunológico, tiene beneficios cardiovasculares, levanta el buen humor y hace que la gente se sienta feliz. “Esto no significa que las parejas tengan necesidad de compararse con las habilidades sexuales y la satisfacción de los artistas en la pantalla. Las relaciones exitosas deben ser algo único creado por cada pareja”, señala la experta.

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