Los diferendos de límites que mantienen Guayas y Azuay por el recinto Abdón Calderón, originalmente jurisdicción del cantón Balao, derivaron hoy, jueves 4 de septiembre, en nuevos incidentes.
Los problemas se suscitaron cuando un grupo que respalda la postura que el recinto pertenece a la parroquia Molleturo del cantón Cuenca, intentó impedir que maquinaria de la Prefectura del Guayas ingrese para realizar trabajos de reparación de las calles.
“Hubo, efectivamente, un intento de no permitir que ingrese la maquinaria. Hubo incidentes, hubo siete detenidos y por nuestro pedido fueron puestos en libertad”, dijo Jimmy Jairala, Prefecto del Guayas.
Explicó que una vez calmado los ánimos y controlada la situación por parte de la policía, se procedió a los trabajos con la presencia del alcalde de Balao, Luis Castro.
“Los ciudadanos se están dando cuenta de que lo que queremos es servir con obras. Además, estamos amparados en la Ley de Límites que dice que en las zonas de controversia se puede trabajar, en este caso, las provincias de Azuay y Guayas. De hecho, los azuayos, en algún punto de Abdón Calderón, están colocando tuberías de agua potable y lejos de mi cabeza estaría decir que se vaya a impedir ese trabajo porque la ley lo permite”, acotó.
Jairala dijo que desde el inicio de este tema ha reconocido que hay muchas familias de Cuenca que se quedaron a vivir en esa zona luego de que sus ancestros fueron parte del personal de trabajadores de una gran hacienda en Balao. “La intervino el IERAC, la lotizó, se la vendió a los propios trabajadores que se quedaron allí pero que no significa que eso constituye un título de propiedad del Azuay”.
La autoridad provincial no ve muy factible una solución directa al conflicto, “porque no veo muy amigable la posición del Azuay”. Y aunque están dispuestos a conversar, cree que el conflicto se podría resolver por la mediación o, como última instancia, por una consulta popular.