Agosto del 2014. El volcán Tungurahua comienza un proceso eruptivo. Foto: EL COMERCIO
Este viernes 17 de octubre del 2014 se cumplen 15 años de la evacuación de los habitantes de Baños de Agua Santa, Pelileo y Penipe, ante la reactivación del volcán Tungurahua, ubicado en la región interandina.
El 17 de octubre de 1999, el Tungurahua dio una de las más fuertes manifestaciones de su reactivación, luego de permanecer 100 años en calma. Aquel día, el volcán arrojó cenizas, lodo y todo tipo de material piroclástico. Eso obligó a la evacuación de los habitantes de estas localidades que están en los alrededores de esta elevación.
¿Qué pasó el 17 de octubre de 1999?
La alarma se encendió no solo en las comunidades ubicadas a las faldas del volcán, sino también en todo el territorio de las provincias de Chimborazo y Tungurahua. De 59 poblados de ambas provincias, cerca de 24 000 personas dejaron sus viviendas y propiedades en 1999. La mayoría de ellos, retornaron un año después.
Hugo Yepes técnico del Instituto Geofísico de la Universidad Politécnica fue uno de los expertos que monitoreó los diversos procesos de reactivación del coloso. Yepes recordó esta fecha y habló de una “carencia en el diagnóstico” del volcán, en esa ocasión. “Muy poco se ha pensado también en que el año 1999 era el año en el cual hubo el colapso bancario. Las circunstancias alrededor de eso implicaban que ese mismo sistema, desde Quito, tenía que decidir sobre 20 000 personas a unos 120 kilómetros”
Hugo Yépez en entrevista con Radio Quito, sobre el volcán Tungurahua.
La crisis bancaria, considera el experto, necesita ser explicado como el contexto nacional en el que ocurrió este fenómeno natural. Recordó además sobre los fax ‘singulares’ de respuesta que recibió de algunas autoridades sobre sus alarmas del volcán. “Me agradecían la información, pero me informaban que la población de Baños estaba muy protegida por el manto protector de la Virgen de Baños“.
Según Yepes, habría que plantearse la pregunta de si la población aun está preparada para este tipo de eventos. “La respuesta ante un sismo 5.1 en Quito sería la respuesta de como estamos preparados. Es parcial porque además fue un sismo pequeño”.
La actividad del volcán actualmente se considerada como moderada y baja.