Una perra, de raza pitbull, atacó al menor en el cuello, en la tarde del sábado 28 de febrero. El pequeño fue trasladado con urgencia al Centro de Salud del IESS, localizado en la calle RÃo Coca, en la terminal norte de la EcovÃa. Lamentablemente se confirmó el fallecimiento.
Luego fue trasladado a la morgue de la avenida Occidental, donde permaneció hasta el mediodÃa de este domingo (01 de marzo).
Los familiares se acercaron a retirar el cuerpo del pequeño, para los servicios fúnebres en el mismo sector donde ocurrió el accidente, en el barrio San José del Inca, localizado en el nororiente.
La FiscalÃa abrió un proceso para investigar las circunstancias en las que sucedió el ataque al pequeño. Según información proporcionada por varios vecinos, quienes pidieron no mencionar su nombre, el niño estaba jugando con otros menores, cuando subió a la terraza donde se encontraba el animal. Su madre escuchó gritos y cuando llegó halló a la perra mordiendo el cuello de su hijo.
Al domicilio de la familia llegó el Comité de Operaciones Especiales (COE), para retirar al animal del domicilio.
La pitbull vivÃa en la terraza de un edificio de 4 pisos, en el que reside una familia, la cual serÃa la dueña del animal.
La perra fue trasladada al Centro de Gestión Zoosanitaria en Calderón. Allà permanece, mientras se realiza la investigación para determinar si debe ser sacrificada o no.
En 2009 se emitió el Reglamento de Tenencia Responsable y Manejo de Perros del Ecuador. La normativa prohÃbe que los canes de raza pitbull o rotweiller sean mascotas, “por el potencial daño y severidad de lesiones que pueden causar ante un ataque al ser humano”, dicta la norma.
A su vez, en la Ordenanza Municipal 048, del Distrito Metropolitano de Quito, se establece que si un perro atacó a un ser humano, causándole daños graves, este deberá ser sacrificado por las autoridades responsables. Esto ocurre luego de hacer una evaluación del comportamiento del animal.
Se excluyen los perros que hayan atacado tras haber sido provocados, cuando hayan defendido a una persona o propiedad privada y cuando cuiden a sus crÃas.
Pero en este caso no hay indicios de que se trate de esta causa. Al momento se espera la resolución de la FiscalÃa sobre el destino que tendrá la pitbull.